Yo te muestro el camino, tú debes recorrerlo

25 11 2008

El Valle del Elqui es bastante conocido por sus senderos, pasividad, observatorios y avistamientos de ovnis que se pueden ver en el lugar. Es un sitio místico dicen muchos, debido a la vida diferente que viven los habitantes del lugar.

Sin embargo, muchos desconocen lo fértil que es el suelo en ese lugar. Olivos, aceitunas y muchos frutos más son plantados y cosechados cada año, generando no sólo el alimento para los habitantes, sino que una de las exportaciones de licores más importante en Chile.

Por lo mismo, hoy en día existen en Chile gran cantidad de viñas que se han preocupado de organizar tours debido al creciente interés de visitantes, tanto nacionales como internacionales, por conocer los vinos regionales. Las viñas, a través de los recorridos, dan a conocer sus plantaciones, estimular el consumo y conocimiento de sus productos, y dar mayor estatus al vino mismo.

Sin embargo, se le han sumado las pisqueras, pues para dar a conocer las bondades de un producto que, peruano o chileno, es indudablemente codiciado. Y es con un interés comercial, pero también de difusión, que ahora se podrá conocer más a fondo de este producto.

La Cooperativa Agrícola Pisquera Elqui, inauguró en la Planta de Capel en Vicuña, el primer centro cultural y museo del pisco, el que pretende fomentar el desarrollo cultural de la zona de Elqui.

La iniciativa tiene por fin dar a conocer la historia del pisco desde sus orígenes en el siglo XVI, así como extender las actividades turísticas del Valle de Elqui en torno a la “Ruta del Pisco”.

El museo permitirá a los turistas de la zona aprender sobre la historia y los principales hitos de la producción del pisco en Chile, así como el aporte de las culturas precolombinas Molle y Diaguita a esta actividad.

Con respecto a la producción pisquera, la muestra incluye instrumentos utilizados para el tratamiento de las uvas desde su fermentación, tales como tinajas de depósito, alambiques para cocción y destilado además de distintos implementos y máquinas anteriores al período de la tecnificación que trajo consigo la energía hidráulica y eléctrica.





Iglesias en el Norte

22 11 2008

En el norte de Chile se encuentran una de las iglesias y centros religiosos más importantes de nuestro país, en donde se pueden expresar los distintos factores de la fe y la religiosidad.

Nuestro país se caracteriza por poseer una fuerte creencia hacia los dioses y distintos santos que se pueden encontrar tanto en el norte, como en el sur, sobre todo en Chiloé. Por lo mismo se han creado un sin fin de iglesias, las cuales poseen una historia única, que las diferencia de las demás existentes.

En esta ocasión el equipo de Reconoce Chile ha querida realizar una selección con las seis iglesias más importante del norte, para que de esta manera podamos conocer más sobre ellas y en nuestros futuros viajes sepamos a dónde dirigirnos queremos practicar nuestra fe o simplemente para turistear:

1.- Iglesia Nuestra Señora de Guadalupe
Ubicada en el poblado de Ayquina, revive cada año los días 7 y 8 de septiembre para la celebración en honor a la Virgen de Guadalupe, dado que se considerada muy milagrosa. Se encuentra absolutamente rodeada por murallas. Fue construida en piedra estucada de color rojo. En términos generales la fiesta atrae a aproximadamente 12 mil personas y de ella destacan las vestimentas utilizadas por los bailarines debido a sus variados colores y extravagancia.

2.- Iglesia de San Antonio de Barraza
Declarada Monumento Nacional en 1977. Se ubica en San Antonio de Barraza a 3 kms. al norte del cruce con carretera a Ovalle. Esta iglesia fue fundada en 1680 y fue construida entre 1692 y 1700, en tierras del capitán Antonio de Barraza.
Su estructura es de muros de adobe de 1 mt. de ancho, con cimientos de piedra madera en la torre, en la armadura de techumbre, en pisos y cielo. En la cubierta, el fierro galvanizado ha reemplazado a la teja. Su alojamiento es modesto, con púlpito y retablo de madera.

3.- Iglesia de Andacollo
Declarada Monumento Nacional en 1981. Ubicada en la Plaza de Andacollo. Fundada en 1893. De estilo neoclásico italiano, con 5 naves interiores y crucero coronado.
Está hecha en pino oregón, con paredes rellenas de adobillo y cubiertas de láminas de fierro galvanizadas. Tiene capacidad para 10.000 personas. Aquí se dan cita las procesiones y grupos danzantes para saludar a la Virgen del Rosario dos veces al año, en octubre y en diciembre.

4.- Iglesia de Guacayán
Declarada Monumento Nacional en 1977. Ubicada en Guayacán, Bahía de la Herradura. Perteneció a la familia Urmeneta asentada en el pueblo de Guayacán en el siglo XIX. Su estructura enteramente metálica fue erigida en 1889 por una empresa belga.
Hasta fines del siglo XIX esta iglesia era el centro urbano del poblado que trabajaba en torno a la fundición de cobre, perteneciente a la familia Urmeneta Errázuriz. Esta fundición ya no existe y su iglesia, ahora capilla constituye un testimonio del tipo de arquitectura metálica en Chile.

5.- Iglesia y Campanario de San Lucas
Para acceder a ella, se ingresa por una torre campanario. La iglesia está rodeada por una muralla en dos niveles. Su construcción fue anterior a 1641, para lo cual se utilizó piedra canteada, la que luego fue pegada y revocada con barro sobre tablas de cactus. Fue declarada Monumento Nacional en 1951.

6.- Catedral de la Serena
Declarada Monumento Nacional en 1981. Se ubica en Plaza de Armas, esquina nororiente, con calle Cordovez. Se erige el primer templo para la fundación de la Serena (1544).
Después de varios daños se construye la actual iglesia encargándose el proyecto al arquitecto francés, Juan Herbage hacia 1844. La estructura es de muros de piedra caliza tallada de Peñuelas en sillares y mortero de cal; cimientos de piedra sin cantear.





¿Dónde se escondía el hippismo chileno?

6 11 2008

pocos kilómetros de La Serena, se encuentra un lugar llamado Punta de Choros. Un sitio tranquilo, rodeados de dunas, playas e islotes, los cuales alguna vez fueron el hogar de las primeras familias hippies en Chile y hoy en día son parte del turismo de la zona.

Se sabe que en Isla Choros vivieron alrededor de quince familias. Se alimentaban de la vegetación y de vez en cuando cruzaban en bote a tierra firme. Sin embargo, el Gobierno declaró la Isla Las Gaviotas e Isla Choros como parques naciones y patrimonio de la naturaleza, hace unos diez años atrás y los habitantes de esos lugres, debieron trasladarse y mudarse a Punta Choros y alegrarse sólo con el turismo.

Hoy en día el lugar es visita obligatoria si se viaje de norte a sur o de sur a norte: Sus extensas playas y dunas son un atractivo increíble para todos los turistas que recorren el norte, sobre todo los amantes de la flora y fauna marina. Pues, la cantidad de delfines y ballenas forman parte de las “mascotas” de este sitio.

Un mar azulísimo cubre la visión mientras las labores de la caleta se mezclan entre botes que salen a la pesca y otros que se llevan a los turistas a visitar la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt, la estrella del lugar, que con sus islas Choros, Damas y Chañaral se convierten en uno de los lugares más hermosos de la región.

Si vas mochileando, es recomendable que partas bien temprano, para que te puedan llevara aquellas personas que andan en auto dispuestas a subir a aquellos turistas que no andan con el capital suficiente. A unos 75 kilómetros de viaje rumbo al norte, desde La Serena y tras una breve bifurcación, se llega al poblado de Los Choros, de pequeñas casas y con una iglesia con campanas de oro, sorprende por la gran cantidad de olivos que verdean el pueblo y que son una de las características del lugar con su afamado y casero aceite de oliva.

Desde acá el camino se vuelve sinuoso y lleno de arena. Sorprende ver parcelados vastos terrenos, ejemplo claro del boom de la zona y cercano a ellos hay una cruz grande, una animita que recuerda a los muertos del barco Itata. Dicha embarcación naufragó en las cercanías de Punta de Choros durante la noche y sus 200 supervivientes, empapados y con frío, acudieron en busca de ayuda a Los Choros. Sus habitantes creyeron que se trataba de fantasmas y no les abrieron sus puertas ni prestaron ayuda alguna, entonces los náufragos volvieron sobre sus pasos y se instalaron en este sector donde acurrucados murieron de frío y hambre.


La emoción aumenta al acercarse la barca a acantilados en donde la fauna se deja observar vivamente. Un grupo de lobos marinos saluda con aullidos el paso de la nave y sorprende verlos encaramados en roqueríos bastante elevados para un ser que en la tierra solamente se arrastra. Pero aún más sorprendente es cuando navegamos cercanos a las playas rocosas de la isla y se observan un montón de puntitos blanco con negro, miles de puntitos que viven y poseen como santuario los tres islotes: el pingüino de Humboldt.

Dichas aves estuvieron a punto de desaparecer de la zona hace unos años atrás, pero gracias a la labor conservacionista de CONAF, estos pingüinos endémicos suman más de 15 mil ejemplares y es posible divisarlos haciendo sus nidos tanto en las orillas de la playa como en peligrosos acantilados a los que suben, quién sabe como, buscando protección.

Punta de Choros

Punta de Choros

Hoy en día, Punta de Choros está sufriendo el ataque de las termoeléctricas que se quieren instalar en el lugar, para generar energía, destruyendo de esta manera el esfuerzo y la pasividad que han generado los habitantes, para mantener el lugar tal como es. Por lo mismo, Re-conoce Chile está apoyando la causa de los habitantes, pues creemos que se está haciendo daño el turismo y la naturaleza de Chile.